Bancarizar, una labor de Patria (Editorial)
La idea de que los bancos se constituyen para ser servidores del gran capital financiero, es bastante extendida, pero puede que no corresponda al nuevo criterio de la banca, en especial cuando obedece al criterio de responsabilidad social y su origen se encuentra en la misma esencia del Estado.
Desde hace cuatro años, más de 900 mil dominicanos han asistido a las jornadas de bancarización convocadas por el Banco de Reservas, más de 130 mil personas han participado en educación financiera, producto de lo cual un porcentaje impresionante ha abierto su primera cuenta de ahorros.
Esa es una labor patriótica de Banreservas que en oportunidades no es objeto de la atención debida, condicionada como está la sociedad a la información de un solo uso y de matiz lastimeramente desechable.
Del total de la población asistida en las jornadas nacionales de bancarización, el 60 por ciento son mujeres y corresponden a un rango de edad entre los 19 y 35 años, de acuerdo con las estadísticas e índices de Banreservas.
Banreservas ha realizado jornadas de bancarización en comunidades estratégicas a nivel nacional con alta concentración de población excluida del sector financiero en las localidades de Villa Juana, Sabana Perdida, Santiago, San Cristóbal, Higüey, San Carlos, Ensanche La Fe y Domingo Savio, en la ribera del río Ozama.
La inclusión financiera es un pilar fundamental en la reducción de la pobreza y el desarrollo económico sostenible, por lo que estas jornadas de bancarización en la República Dominicana están cerrando brechas y brindando acceso a servicios financieros a miles de personas que habían sido excluidas del sistema bancario formal.
Según un informe de la Superintendencia de Bancos (2024), solo un 55% de las personas se encuentran bancarizadas, cifra que se ha ido reduciendo con el programa “Bancarizar es Patria”.
Lo que hace Banreservas con una constancia admirable es integrar a una parte esencial de la población dominicana que generalmente no es tomada en cuenta a la hora de evaluar las grandes acciones financieras en el país.
Pero, lo que representa en realidad esta estrategia es una labor patriótica que debe ser reconocida y emulada por todo el sistema financiero nacional.
Nuestro reconocimiento a Samuel Pereyra, presidente de Banreservas, al equipo que le acompaña y, en especial, a esos dominicanos y dominicanas de a pie, que han emprendido una ruta de emancipación económica.
