Teatro Nacional

Puntual y emotiva inauguración del 14 Festival de Cine Global Santo Domingo

SANTO DOMINGO El Festival de Cine Global de Santo Domingo (FCGSD) inauguró su 14vª dedicado a Chile como nación que es una potencia fílmica y al legado del actor afroamericano Sidney Poitier y, estrenando de paso, una película de acción y fondo socio político que enfoca una etapa de la historia dominicana reciente muy poco tratada: los doce años de Joaquín Balaguer y la lucha armada de la izquierda.  Serán proyectadas en total 97 producciones según la cartelera.

Entre los jurados del exterior, llaman la atención Francisco Pancho Lombardi (Perú/La boca del lobo, 1998) y el colombiano Ciro Guerra (director de la multi premiada El abrazo de la serpiente, 2015 y la impecable y sugerentemente autóctona Los Viajes del Viento, 2009). Si a algunos jurados debería perseguir la prensa para entrevistas, serian estos dos hombres.

Agradecemos las fotos de este contenido a Notaclave.com (Alfonso Quinones)

La ceremonia

La velada inicio con la interpretación de una danza chilena, seguida de la interpretación a cinco voces de Por Amor (Nini Cáffaro, la potente voz de  Keren Montero, Pochi Familia (en tono de salsa)  Víctor Pintor, con un sorprendente acento rockero y el sello de merengue al inmortal tema, a cargo de Jandy Ventura, quienes provocaron la emoción digna de disfrutar el tema nacional de Rafael Solano que mas lejos ha llegado en su  internacionalización y por su mensaje cargado de buen mensaje.

A la maestra de ceremonias, le falta un poco de experiencia que ira tomando en la medida en que se le vuelva a dar oportunidad con un libreto mas emotivo y menos nervios de su parte. Es buena, pero debe reafirmarse.

La otra lucha

Cinematográficamente, el plato fuerte de la apertura fue la película La otra lucha, (Hans García) realizada en condiciones extremas de producción por ser la primera que se enfrentó a la pandemia Covid 19, aparte de sus indudables valores cinematográficos, sobre todo en la dirección de arte que transporta al espectador a los inolvidables (por muchas razones) doce años de Joaquín Balaguer.

La película es una cantera de nuevos rostros nuevos, en particular el protagonista Andrés Castillo  y las actuaciones de actores y actrices de reconocido talento:  Héctor Aníbal, (Pepe) Sierra, Manuel Raposo, Camila Santana, Ruth Emeterio, (el mejor papel femenino),  Richardson Díaz, Héctor Sierra y  Héctor Then, entre otros que detallaremos en la ficha técnica en una critica aparte a esta producción.

La otra lucha que expone la lucha contra el gobierno de Joaquín Balaguer la desarrollaban comandos izquierdistas armados que atracaban bancos “para financiar la revolución”, en la cual se presenta claramente la injerencia de agentes de la CIA ante la policía como cuerpo represivo para exterminar a los combatientes revolucionarios, de los que muestra sus acciones violentas, así como las torturas policiales. Al inicio de la película se proyecta: “Esta película narra hechos de ficción. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia” un cuento muy difícil de digerir al ver la denuncia, casi documental, de los hechos expuestos.

El coloquio Poitier

El doctor Leonel Fernández, presidente Ad Honoren del Festival y la Fundación Global Dominicana con la participación de John Gibson, de la Liga por la Inclusión Afroamericana en el Cine y  Pamela Poitier (hija del actor)  sostuvieron un conversatorio relativo a temas de inclusión, pertenencia y representación en cine y televisión de los afroamericanos y otras minorías.

El fallo del coloquio fue que se realizó en un idioma que no es el español y sin traducción. No debió ser. Es un error que se ha repetido en varias ediciones del FCGSD.

Reconocidos: Elvira Taveras, quien recibió el Reconocimiento Lidia Bastos, por su trayectoria profesional en el séptimo arte; por sus cualidades éticas, humanas y profesionales se reconoció a John Gibson con el galardón Arturo Rodríguez, en apoyo a su esfuerzo en pro diversidad, la equidad y la inclusión en el séptimo arte en Estados Unidos y a Geovanny Cruz Durán con el reconocimiento Francisco Palau por ser orgullo del arte y cultura en la República Dominicana.

Origen y patrocinadores

El FCGSD es una iniciativa de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode), concebido por su presidente-fundador, Leonel Fernández, gran impulsor de la industria del cine en la República Dominicana. La ley vigente que ha desarrollado el sector fue uno de los grandes aportes de su último período como presidente dominicano.

Los patrocinadores principales del Festival son: ClaroVideo, Palacio del Cine, Distribuidora Corripio, Banreservas, Sigma Patroleum Corporation, Peña Defillo, Procomunicaciones, Plaza Lama, Hodelpa Nicolas de Ovando. DGCine, Global Talks RD, Editorial Funglode, Cap Cana, Constructora BISONÓ, GFDD, IGlobal, BHD León, FinalPost RD, Funglode Films, Ginaka, Lantika, Ministerio de Salud RD, Colorín y el periódico Notaclave.com, que dirige Alfonso Quiñones.

Películas:

Ópera Prima Ficción “Jimmy Sierra”. 

  • Amparo, de Simón Mesa Soto, de Colombia;
  • Clara Sola, de Nathalie Alvarez Mesén, producción de Suecia, Costa Rica, Bélgica y Alemania;
  • Freda, de Gessica Geneus, Haití y Francia;
  • Inmersión, de Postiglione, de Chile y México;
  • Josefina, de Javier Marco, de España;
  • La Civil, de Teodora Ana Mihai, de México y Bélgica;
  • Libertad, de Clara Roquet, de España,
  • Perfume de Gardenias, de Macha Colón, Bélgica
  • Sin señas particulares de Fernanda Valadez de México.
  • Manco Cápac, de Henry Vallejo, Perú;
  • Samichay: En búsqueda de la felicidad, de Mauricio Franco Tosso, de Perú y España;
  • La vida era eso, de David Martín de los Santos, de España, Bélgica, Brasil y Argentina.

Ópera Prima Documentales “Fernando Báez”

  • Ernesto en la tierra, de Manuel Bonilla, de Nicaragua y Costa Rica;
  • Ginger`s Paradise, de Alejandro Quiroga, de Bolivia y Estados Unidos;
  • Jambalaia, de Breno Moreira, de Brasil;
  • Tierra de leche y miel, de Héctor Domínguez Viguera, Carlos Mora y Gonzalo Recio
  • Buscando La Película (Verano 2020) de Enrique García-Vázquez de España;
  • Mapa de sueños latinoamericanos, de Martín Weber, deArgentina y México;
  • Morena (s), de Victoria Apolinario, Iván de Lara del Villar, de la República Dominicana y Argentina
  • Avanzaré tan despacio, Natalia María Solórzano Vásquez, de Costa Rica
  • Manuale di storie dei cinema de Stefano D’Antuono y Bruno Ugioli. Italia.

También, Los reyes de la rumba, de Alan Brain, de Perú y Estados Unidos; El silencio del topo, de Anais Taracena, de Guatemala, y Guerrera, de José Castillo, de la República Dominicana y Estados unidos. 

  • Cortometrajes
    Yellow cross my heart, de Inga Kempe y Elina Sahilin, de Suecia;
  • Las palabras correctas, de Adrian Myose Dullin, de Francia;
  • Hambre, de Mark Dollard, de Irlanda;
  • Iskra, de Adrian Replanski, de Francia / Rusia
  • El secreto de Cassandra, de Lionel Arazi, de Francia;
  • Ciudad Bucle, de Gabriel Sánchez, Bolivia.
  • Espejismo, de Sil Van Der Wored, de Antillas Nerlandesas y
  • H No pasa nada, Giulio Neglia y Victoria Naranjos Montoya, de Italia y
  • México;
  • Rojo, el color dentro, de William la Portilla, de Perú;
  • Tiburón, de Nash Edgerton, de Australia;
  • Tormenta Silenciosa, de Grace Hsia, de China y España, y
  • Pegado, de Pablo Tobón Gallo, de Colombia.
  • El recreo, de Navid Nikkhah Azad, de Irán;
  • Los autos asesinos, de Bogdan Mustata, de Rumanía;
  • La mujer bajo el árbol, de Karishma kohli, de Estados Unidos;
  • El joven que también fue fuego, de Martin Oliveros Heinze, de Albania;
  • Hotel cápsula de Tokio, de José Germán Ariza, de España y la República Dominicana
  • Casa de árbol, de Soo-min Park, de Korea d

A puerta cerrada: Teatro universal de la esperanza

Hacer vigente el  Teatro de la Esperanza, ese que nos ofrece la vuelta al rapor indefinible del actor frente al espectador, no es tarea sencilla.

Ese que representa  una vuelta al hecho teatral impecable y firme que hacer arder lo escénicamente superficial que demanda simultáneamente de un hondón de condiciones conformadas por criterio, sentido, capacidades estéticas, disposición de trascender el facilismo escénico y, sobre todo, actitud de marcar el alma del espectador, con cada parlamento bien escrito, con cada gesto preciso, con cada manera de llenar la mirada y el ánimo, de un perfume que por escaso es en sí mismo valioso,  es cuanto acaba de lograr la compañía de teatro del Teatro Nacional con este hecho dramático, escrito por Sartre en 1943 y que ha dado al teatro moderno el mismo escalón a la galería de sus trascendencias.

A Puerta Cerrada (Jean Paul Sartre,) es la principal obra de teatro existencial del agudo filósofo francés, y que estableció en el imaginario popular su concepto de que “El infierno son los otros” es la propuesta con que se lanza oficialmente la compañía de teatro del Teatro Nacional, supone mucho más que el debut de un cuerpo actoral que nos impresiona por la intensidad y capacidad de adaptación a las propuesta de libreto mayor.

Esta versión dominicana se une a las galas de las versiones presentadas desde 1944 a 2019 en espacios tan prestigiosos como el Teatro Eliseo, (Roma en 1945); Teatro de la Comedia, (Barcelona, 1948); Teatro Poliorma, de Barcelona, 1967);  le Théâtre des Mathurins, (Paris 1956); e, Theatron Espacio Escénico, (Monterrey, 2016) y el Teatro San Jerónimo, (México, 2019) para solo citar algunos de los escenarios que se han honrado en montarla. Puertas Cerradas es un punto infaltable en todo buen repertorio teatral de prestigio internacional. Ahora nos tocó a nosotros disfrutarlo, en medio de las condiciones de un teatro existencial de la esperanza y del llamado de la vuelta a la escena.

La selección de la pieza tiene el oportuno sentido de un director teatral que apuntó con exactitud cuál  pieza  elegir para que se estableciera para este 2021, como la producción que debe marcar la escena nacional dominicana, tanto por su trascendencia internacional como por los elementos artísticos y técnicos.

A Puertas cerradas es un montaje que superara la capacidad de sus actores, músicos y otros artistas que participan. Es teatro que desborda de sí mismo.

A Puertas Cerradas, es trascendente aun cuando implique elementos que pudieron ser mejores, como el uso (dos veces) de la expresión coloquial “? En serio?” que intenta ser una modernización de los parlamentos pero que ofrece un innecesario sabor de cliché post modernista, tan incensario como el sello a lugar común que implica. Sartre nunca escribiría  “?En serio?” por lo que sin dudas, alguien se dejó colonizar el pensamiento con una frase  extraña al discurso esencial de una pieza.

Las actuaciones

En algunos parlamentos trastabillan algunos vocablos que debieron salir con pronunciación muy limpia, pero afortunadamente no ni frecuente ni se constituye en factor de molestia, compensado por la excelente vocalización dramática que exhiben los cuatro intérpretes en general.

Patricia Ascuasiati vuelve a revelar su capacidad actoral (que nos impresionó gratamente por la fuerza con que introduce en La Gunguna,-2015- filme  fundamental dominicano), tomando con maestría el universo gestual y vocal de El Camarero con movimientos y una esquemática vocal precisa, marcial y lúgubre.

José Lora (Checho) tiene oportunidad de sacar desde sus pasillos interiores, el actor de carácter que nos ha escamoteado por años tanto el teatro musical como la producción televisiva de entretenimiento. Está rico y denso en su Garsín.

Ana Rivas (Estella) reitera la fortaleza con que acomete sus desafíos actorales y se nota como disfruta la facturación filosófica de sus parlamentos, actuando justo como personaje de contrapeso y de interrelación con los demás de su elenco.

Sabrina Gómez Garden,  muy diversa en sus expresiones de arte, encuentra en el  teatro de este nivel, la meta precisa a la que debe llegar. Provocadora,  insistente, seductora, la Inés que ofrece es personaje de contracultura que tiene a su cargo la otra perspectiva de la sexualidad establecida como “normal”. Nuestro consejo es que deje todo lo demás. Lo suyo es actuar visceralmente.

Escenografía y otros recursos

Con una bien lograda  escenografía hermética de un habitación sin ventanas, con una sola puerta, definida por líneas rectas, con  los efectos especiales para proyectar en las paredes, pinturas clásicas sobre el infierno con musicalización en vivo (tuba, trompeta y piano), con un  vestuario, peluquería y maquillaje  de gusto preciso.

La obra se había estrenado en  París,  en mayo  de 1944,  justo tres meses antes de la  liberación de la ciudad durante la  Segunda Guerra Mundial, victoria que se alcanzó el 25 en agosto de 1945, cuando el teatro volvía a demostrar que era capaz de ser en las peores circunstancias y a juzgar desde sus escenas a cuanto ocurría más allá de las puertas del teatro.

Fechas, horario y boletas 

Las presentaciones son de jueves a domingo, durante  julio, en la Sala Ravelo del TN .Jueves y viernes a las 4:00 p.m. /sábados y domingos a las 11 de la mañana y  4:00 p.m. Boletas a la venta en la boletería del Teatro Nacional.  Entrada general mil pesos, con descuentos  (30%), por mayoría de edad (65) y descuentos por tener una o dos dosis de las vacunas, hecho que hay que documentar.

Al final del montaje, un emocionadísimo director (Carlos Espinal) describe lo que represento el trabajo de montar la pieza.

El valor de la pieza

A puerta cerrada  es un texto dramático de tendencia existencialista,  del filósofo francés Jean Paul Sartré. Es una de las obras que ha estado en las tablas de los principales teatros de Europa y América y ha tenido cuatro adaptaciones al cine: Huis clos (1954), (Jacqueline Audry); A puerta cerrada (1962), (Pedro Escudero); No Exit (1962), (Tad Danielewski) y No Exit (2006), (Etienne Kallos

Ficha Técnica

Dirección General: Carlos Espinal

Dirección Musical: Dante Cucurullo

Banda sonora: Daniel Hernández Gracia (Trombón) Juan Junior García (Tuba) Dante Cucurullo (Piano)

Iluminación: Roberto De León

Encargado de Producción: Amaury Esquea

Asistente de Director: Ramón Emilio Candelario

Diseño de iluminación: Roberto De León

Sonidista: Michael G. Jiménez Galán

Maquillaje: José Navarro

Traducción para República Dominicana: Ana Rivas

Escenografía: Track Stage Projects Teatro Nacional Eduardo Brito Carlos Ortega

Tramoyas: Eusebio Santos Reyes Jonás Abreu

Escultura: Patricia Ascuasiati

Vestuario y Estilismo: Teatro Nacional Eduardo Brito

Modisto: Rolando Antonio Rosario Pontiel (Antony)

Elenco: Sabrina Gómez (Inés)  Ana Rivas (Estella) José Lora (Checho) ( Garcin) Patricia Ascuasiati: (El Camarero).

Dejar de ver  A Puertas Cerradas, funciones que se desarrollan con un estricto protocolo de distanciamiento, sería dejar de disfrutar el que probablemente sea el mejor ofertorio teatral del 2021.

Enlaces relacionados:

EL PROGRAMA

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CRONICA PREVIA DE ALFONSO QUINONES

TN ofrece hoy y mañana concierto a madres, apoyado en talento de jóvenes músicos sinfónicos

El Teatro Nacional presenta hoy y mañana sus grupos escénicos propios, con un espectáculo titulado Homenaje a las madres en el cual la base es la música a cargo de 47 jóvenes que conforman la

El Teatro Nacional presenta hoy y mañana sus grupos escénicos propios, con un espectáculo titulado Homenaje a las madres en el cual la base es la música a cargo de 47 jóvenes que conforman la Orquesta Sinfónica del TN bajo la dirección del maestro Dante Cucurullo.

Tras haber visto el ensayo general del Homenaje a las madres, es evidente de estar frente a la existencia de una generación sinfónica de relevo y que estimula, con su capacidad instrumental de las diez piezas que integran el repertorio.

Las piezas que serán presentadas son Bugler,s Holiday, The Typewriter Fiddle- Faddle y Blue Tango todas compuestas por Leroy Anderson,  Suite Carmen: Preludio, Aragonesa y Habanera (George Bizet), Los Toreadores, El Relicario (José Padilla), Nostalgia (Suite Macorix) de Bienvenido Bustamante , El Murciélago (Obertura) (Johann Strauss)  y el gran cierre con la Obertura de  West Side Story (Leonard Bernstein).

El repertorio musical incluye partes de obras clásicas, algunos segmentos de obras de teatro musical y arreglos especiales de baladas y ritmos populares latinos y españoles. Una delicia musical lo que logran estos muchachos y muchachas bajo la batuta de Cucurullo, un director obsesivo que hace repetir una y otra vez, pasajes que no le satisfacen. Los jóvenes músicos repiten con  la conciencia de que lo buscado se llama perfección profesional. Como grupo propio de Teatro Nacional, que debió haberse integrado hace años, estos chicos con edad promedio de 21 años,  han afrontado el reto estético de producir un sonido impecable, intenso y afinado al extremo.

Varios de los números musicales son reforzados por un cuerpo igualmente joven de bailarines de ambos sexos, con coreografías de Erick Guzmán y Nathalie Borsos.

La función Homenaje a las madres  de este sábado 29, se presenta a precio general de 500 pesos y  350 pesos los estudiantes y mayores de 60 años. Este viernes la función es por invitación.

El espectáculo, basado en el color rojo  además de un fragmento del conocido poema Canto a mí mismo, del poeta norteamericano Walt Whitman, en  voz del actor  Vicente Santos, uno de los que monta el nuevo grupo de teatro de la institución cultural.

La interpretación de la Orquesta Sinfónica del TN  es de un nivel profesional caracterizado por el buen desempeño,  coordinación, armonía, espíritu de equipo, y una  limpia y tierna afinación.

El director Cucurullo muestra que tiene dominio de las piezas, disfruta cada uno de sus compases y es secundado por la complicidad de 47 jóvenes que han encontrado una oportunidad de desarrollar sus aptitudes artísticas  y de realizarse artísticamente desde ahora.

 

Tras haber visto el ensayo general del Homenaje a las madres, es evidente de estar frente a la existencia de una generación sinfónica de relevo y que estimula, con su capacidad instrumental de las diez piezas que integran el repertorio.

Las piezas que serán presentadas son Bugler,s Holiday, The Typewriter Fiddle- Faddle y Blue Tango todas compuestas por Leroy Anderson,  Suite Carmen: Preludio, Aragonesa y Habanera (George Bizet), Los Toreadores, El Relicario (José Padilla), Nostalgia (Suite Macorix) de Bienvenido Bustamante , El Murciélago (Obertura) (Johann Strauss)  y el gran cierre con la Obertura de  West Side Story (Leonard Bernstein).

El repertorio musical incluye partes de obras clásicas, algunos segmentos de obras de teatro musical y arreglos especiales de baladas y ritmos populares latinos y españoles. Una delicia musical lo que logran estos muchachos y muchachas bajo la batuta de Cucurullo, un director obsesivo que hace repetir una y otra vez, pasajes que no le satisfacen. Los jóvenes músicos repiten con  la conciencia de que lo buscado se llama perfección profesional. Como grupo propio de Teatro Nacional, que debió haberse integrado hace años, estos chicos con edad promedio de 21 años,  han afrontado el reto estético de producir un sonido impecable, intenso y afinado al extremo.

Varios de los números musicales son reforzados por un cuerpo igualmente joven de bailarines de ambos sexos, con coreografías de Erick Guzmán y Nathalie Borsos

La función Homenaje a las madres  de este sábado 29, se presenta a precio general de 500 pesos y  350 pesos los estudiantes y mayores de 60 años. Este viernes la función es por invitación.

El espectáculo, basado en el color rojo  además de un fragmento del conocido poema Canto a mí mismo, del poeta norteamericano Walt Whitman, en  voz del actor  Vicente Santos, uno de los que monta el nuevo grupo de teatro de la institución cultural.

La interpretación de la Orquesta Sinfónica del TN  es de un nivel profesional caracterizado por el buen desempeño,  coordinación, armonía, espíritu de equipo, y una  limpia y tierna afinación.

El director Cucurullo muestra que tiene dominio de las piezas, disfruta cada uno de sus compases y es secundado por la complicidad de 47 jóvenes que han encontrado una oportunidad de desarrollar sus aptitudes artísticas  y de realizarse artísticamente desde ahora.

Tenor mexicano dice que para cantar pop no hay que tener educacion en la voz

El cantante operático mexicano Ramón Vargas, de amplio prestigio internacional, afirma que para cantar música  pop es  evidente que no hace falta una voz educada. El cantante operático, sostiene: “Actualmente los parámetros han cambiado y la mezcla del Pop y otras corrientes han hecho que los intérpretes no forzosamente tengan que tener voces extensas ni educadas. Pero escuchar cantar las canciones populares con voces educadas les da un valor diferente”.

El maestro Vargas explica que se decidió por el canto lirico pero que jamás dejé la música de México ni la de Agustín Lara que es muy variada y emotiva.  Revela que Agustín Lara nació en la Ciudad de México, pero él siempre dijo que era de Veracruz (Jarocho) así que todos creen, para orgullo de los Veracruzanos que él nació allá.

Es la primera vez que actúa en el país el 28 de agosto en la Sala Carlos Piantini, a las 8:30 PM. en la   Gala Lírica, con motivo del 46 aniversario de la inauguración del Teatro Nacional. El maestro  Vargas quien debutó en 1982, es considerado como una de las mejores voces operísticas del tiempo presente y uno de los de mayor equilibrio en belleza y técnica vocal.  ​Ganó en 1982 el primer lugar del concurso de canto «Carlo Morelli» y debutó en 1982. Ha estado invitado a formar parte de cuadros operísticos en teatros de Europa, Estados Unidos, Canadá, América Latina y Japón.

Defiende que se hagan conciertos masivos en la TV, o los conciertos veraniegos que son la delicia de los turistas en tantas ciudades europeas o los festivales al abierto como Verona, Orange y Macerata. Pero insiste en que se debe estimular que la gente vaya a los teatros a ver las óperas o a escuchar las sinfonías en donde fueron concebidas, en vivo.

“No hay nada como disfrutar las óperas en el espacio maravilloso e íntimo que te da un teatro” afirma.

Sobre la influencia de la música mexicana en América Latina dice: “La música mexicana se volvió muy famosa en toda Latinoamérica probablemente por sus películas. En los años de oro del cine mexicano se popularizaron muchas de estas canciones que luego entraron en el gusto de todos. Jorge Negrete, Pedro Infante, Javier Solís, Antonio Aguilar y otros muchos contribuyeron con sus interpretaciones a que esto sucediera”.

Refiere que las rancheras tocaban temas que en ese momento eran muy sentidos: “La vida campesina contra la vida de las ciudades, el amor y el desamor, las luchas sociales, todo esto expresado con gran emoción e ingenuidad. Creo que por eso se volvieron tan famosas”.

Aprovecha el tenor para enviar un mensaje al pueblo dominicano: “Los pueblos de Latinoamérica somos pueblos hermanos. Estoy muy feliz de visitarles y espero dar lo mejor de mí mismo. Muchas gracias por recibirme”.

La Traviata: el gran suceso operático 2019

La Traviata, ópera de Guiseppe Verdi,  quinta vez que se monta en el país, es el más importante acontecimiento lírico de este 2019, dada la suma exquisita de sus de sus talentos artísticos y técnicos y el  enorme  y el  bien cumplido desafío de su montaje  al tenor del Santo Domingo de 1950.
Deben existir pocas palabras con suficiente fuerza expresiva para dar gracias a Fidel López, por la certeza de su proyecto y por su trabajo de provocar todo el trabajo y el afán de meses, para lograr La Traviata en un nivel de excelencia, tal cual ha sido.
Con esta quinta versión de  La Traviata, la más dominicana de todas  las producidas hasta el momento por su ambientación, ratifica el valor de nuestros talentos , 95% es dominicano), expone al público una selección de  intérpretes, un  afinadísimo coro de 100 voces y 70  instrumentistas de la Sinfónica Nacional, bajo la dirección de Jose Antonio Molina, todo sustentado por un largo ejército de técnicos y asistentes que no salen al entablado pero cuya labor resulta imprescindible para que la experiencia del público, resultara inolvidable.
La Traviata no puede ser catalogada a partir de esta representación como un montaje operático más debido comporta un mensaje: los dominicanos somos capaces de altas y nobles tareas de trascendencia y que el país puede igualarse a cualquier nación desarrollada, cuando llaman al desafío de producción y montaje de una gran obra clásica en las banderas del canto en su expresión más alta.

 
La soprano Nathalie Pena Comas hace con una magia especial los tránsitos vocales (coloraturra, lírica y finalmente dramática cuando es vencida por la enfermedad).
Cuanto discurre desde escena y en cada uno de sus tres actos tiene un estilo internacional, por el cuidado y esmero que denotan las interpretaciones, el vestuario y a música en vivo.
Resalta la consistencia y verosimilitud tanto de la escenografía como el vestuario a cargo de Leonel Lirio, que le supuso una reconstrucción fiel de la época la mejor lograda de cuanto hemos visto al reconstruir con un apuntado profesionalismo en diseño la atmósfera vestuarista del Santo Domingo de clase alta de los años cincuenta.

Magnifica la producción general de Fidel López, quien vuelve a demostrar su ímpetu emprendedor visionario   y el vestuario
Otilio Castro es una de las jóvenes voces tenores que causa un impacto de renovación. La firmeza de su voz se une a un manejo de sus colores vocales que lo trasladan a un sitial promisorio en nuestro canto lírico.

Lo que logra Carlos Veitía en coreografía es como para inclinarse reverente y la dirección escénica a cargo de Eduardo Villanueva completa un equipo equilibrado y sobrado de capacidades.
El montaje operatico permite sentir y disfrutar a María Karatsava, Nathalie Pena-Comas, David Astorga, Pedro Carrillo, Glemmer Pérez, Pura Tyson, Sibelle Marquéz, Sayli Pérez, Eduardo Mejía, Kenny Gómez, con la dirección de voces de la maestra Paola González.
Ficha Técnica:
LA TRAVIATA
Dirección artística y musical
José Antonio Molina
Producción general y Escenografía
Fidel López
Presentada por Ópera RD,
Dirección escénica
Eduardo Villanueva
Dirección coral
Elionai Medina
Dirección Vocal solistas locales
Paola González
Coreografía
Carlos Veitía
Vestuario
Leonel Lirio
Iluminación
Bienvenido Miranda