“El mar, el mar…siempre recomenzando”, tal cual decía Paul Valery, el poeta francés que se perpetuó en la memoria de la humanidad por su drama y desgarro del paisaje humano y marino, será siempre permanente tema a desarrollar.
El mar ha sido objeto, en tanto tema de investigación e inspiración, de infinidad de títulos que han descrito y trazados caminos marinos en derredor.
Ámbito fluido e infinito de esperanzas desplegadas sobre sus oleadas, ruta de transporte para descubrimientos y explotaciones de todo tipo, el mar tiene cada vez renovada presencia por su idílica, conflictiva y compleja relación con el género humano.
Hay emociones indescriptibles que sólo el mar es capaz de general, por sus fuerzas y sus giños a la infinita belleza extendida de azules (desde el turquesa hasta el grisáceo de las distancias).
Ecos de la Costa de ninguna forma puede ser considerado como un libro más sobre mares y costas. Es un patrimonio de arte, fe y ciencia sobre la relación con el mar y la riqueza que en más de un motivo, nos bendice con su manto marino y sus condiciones, costas incluidas, su poder e influencia en la vida económica y ambiental.
Para el caso de este libro de arte y ciencia, Domingo Marte nos sorprende como autor y editor de un estudio gráfico del todo el litoral marino dominicano, que expone en 29 tramos, con todos sus detalles, captados por un asombroso talento que desconocíamos en este autor, ingeniero agrónomo y ambientalista gestor de conciencias juveniles y profesionales.
Lo que se descubre con este proyecto editorial es una enorme identificación sensible del autor con su tema. Lo que se devela es la vinculación de años de un hombre con el complejo tema del ambiente y, dentro de este eje, con el mar y sus capacidades y lenguajes, su belleza indescriptible, su fuerza económica expresada en más de un sentido.
Lo que se descubre, además lo científico, es al artista Domingo Marte, revelado ahora como nunca antes. Bien ha hecho el Banco Popular al autorizar, para su acreditada colección bibliográfica de fin de año, en tanto equivale al amor entonado por la salud del ambiente, llamado a ser racionalmente explotado por el ser humano.
Lo que ha logrado Marte es uno de los más completos y hermosos informes del ambiente costero nacional, con una belleza y detalle tales que hacen que brote límpido, el orgullo del ser nacional por medio de cada una de sus fotos en las 450 páginas (incluyendo las dos oportunas traducciones al inglés y al francés).
La presente, principal obra educativa de Marte, comporta un llamado al conocimiento del litoral, expuesto como nunca antes, y de reflexión sobre: 1- El desconocimiento de sus recursos, que no se detecta a la simple mirada del visitante y 2.- Al aprovechamiento y conservación de sus riquezas.
Técnicamente, el despliegue fotográfico de que hace galas Ecos de la Costa, establece un referente, gracias a una pasión oportunamente conducida por Marte, que resume en este trabajo, años de investigación, de viajes de fines de semana, de observaciones ambientales, de ausencia del seno familiar, para estar tomando el pulso en detalle a nuestras costas.
Entre los recursos a que apela Marte, esta la foto aérea, la cual produce efectos de fascinación y que generan un renovado amor por el suelo patrio, aun cuando ese sea solo uno de los objetivos del proyecto; usa el enfoque cerrado (close Up), la panorámica de golpe de vista a la altura de la mirada humana y las imágenes que congelan el preciso instante de agitación o quietud de las aguas.
Una obra de compilación imprescindible de un recurso natural que tiene condiciones que exceden la admiración de circunstancia. De lo que se trata el título, magníficamente diseñado por Ninón de Saleme, es de la preservación de la vida.
Valga destacar la labor de impresión y encuadernación, responsabilidad de Amigo del Hogar, una empresa editorial tanto singular por su eclesiástico patrimonio empresarial, – propiedad de Los Misioneros del Sagrado del Corazón de Jesús- como por su calidad técnico/artística en el oficio de la impresión, lo que la sitúa en entre las tres mejores imprentas de la República Dominicana.
Ecos de la Costa. Travesía por el litoral marino dominicano. Domingo Marte. Banco Popular Dominicano con Coordinación editorial: Vice-presidencia Ejecutiva de Relaciones Públicas y Comunicaciones; fotografías y textos: Domingo Marte (con excepción de las de Enrique PLugibet – Arrecifes de coral; Miguel Peralta –Bahía de Jura, Flamencos de Oviedo e Isla Alto Velo; diseño y arte final: Ninón León de Saleme; impresión: Amigo del Hogar. Santo Domingo. RD, Octubre 2016.