El cine dominicano registró altas y bajas. Fue un tiempo de avances, sorpresas, repeticiones de esquemas a ser superados, acertados cambios de género de directores que se atrevieron a dar un salto, virtuosismo sobre todo de parte de jóvenes directores que pusieron la mejor nota a la jornada, un rico enfoque hacia la cultura, el arte la literatura dejando clara la vocación de calidad en buena parte de las producciones y aireando nuevos horizontes estéticos e industriales.
2017 fue un año de avances en la industria, justificando todo el esfuerzo económico que demanda el cine .El cine demuestra paga cada centavo invertido en proyectos, dejando clara la tarea de una mejor supervisión de los conceptos (guiones) antes de la primera orden de rodaje (“Acción”).
El criterio toma en cuenta solo las películas dominicanas estrenadas en pantallas comerciales, por lo cual obras respetables como Y a Dios que me perdone (Ángel Muñiz/Estudios Quitasueño), interesante proyecto socio-político un poco más directo de lo que habríamos de un director que es fundamental en la industria por su obra y su actitud frente a sus colegas, debido al desprendimiento y la solidaridad que deja expresar en su paso por la industria..
En primer lugar tenemos un empate:
1-Carpinteros, drama carcelario extraordinariamente creativo en que se mixturan las notables actuaciones profesionales con las de sus actores naturales, guardianes penitenciarios e internos en rehabilitación, y que permitió la primera entrada de una producción local al Festival de Sundance. Fue la más destacada en festivales internacionales en los que obtuvo seis premios en los festivales de Guadalajara, de Nuevo Cine Latinoamericano (Cuba), el Havanna de NY, de Cine Latino de Toulosse, el de Santander, de la los Asociación de Productores de Cine Latino (NY). Fue la cinta que acaparó éxito de crítica y triunfo en la taquilla. Fue la selección oficial dominicana para los premios Oscar (Película Extranjera y los Goya) como pre-nominada.
- Melocotones, de Héctor Manuel Valdez, comedia amorosa de retroficción realizada en el municipio petromacorisano de Guayacanes, con las actuaciones de Peter Vives, Joaquín Ferreira y Frank Perozo, realizada con la fuerza de un pulso dinámico y joven que juega con los tiempos paralelos y circulares, empleando básicamente tres personajes y una aparición significante de Frank Perozo. Su valor radica en la perfecta reconstrucción del mundo que plantea, atenazado por la tecnología ochentera y con vuelos de ficción que envuelven al espectador. Su calidad la llevó a ganar el premio película del Festival Raidance 2019, uno de los más importantes del mundo en cine independiente.
- El Hombre de Cuida, de Alejandro Andújar, correctísimamente realizada, con actuaciones impecables, y enorme sentido en sus detallados planos. No tuvo premios internacionales, no contó con el beneplácito de la taquilla. El director, guionista reconocidísimo, se aventuró a sentarse en la silla del director sobre un concepto que había elaborado con María del Mar.
3- Reinbou (Andrés Curbelo y David Maler), sobre novela de homónima del escritor domínico-puertorriqueño Pedro Cavilla y que se torna en una de las adaptaciones literarias mejor logradas en el cine dominicano. Cinta de época, demandante en sus retos de producción. Portadora de un estilo visual que recreó dignamente el ambiente provincial post-guerra de abril de 1965. Probablemente la mejor actuación de Naslha Bogaert y la develación histriónica del niño actor Erick Vásquez (Maceta).
4 Colao se nos cuela en una quinta posición por la belleza y gracia con que se realiza la historia, sus dotes de producción, sus actuaciones sentidas de la Bogaert y el Manny Pérez, suplementado, con un edición grácil y efectiva, que también se asimila a una oportuna onda de resaltar las características de la cultura dominicana. Fue la cinta mejor promovida por una completísima estructura de mercadeo, correspondiendo al perfil de una obra de alta facturación. Marca, junto a otras, el nuevo caracter de la comedia comprometida con un cine que aspira a trascender.
5- Patricia, regreso del Sueño, de René Fortunato, caracterizada por sus altos valores de producción, una historia de amor tierna solazada en las expresiones culturales dominicanas. Sobre sale por su fotografía, su banda sonora envolvente-
6 Sambá, drama social boxístico deportivo de Laura Amelia Cabral e Israel Cárdenas es la sexta producción en trascendencia. Siendo como fue trabajo de encargo, los realizadores lograron imprimir su estilo de dirección meticuloso, con notables actuaciones del productor Ettore D´lessandro, Laura Gómez y Argenis Sosa. Con un final poco complaciente, la cinta es disfrutable. Este título fue selección oficial del Festival de Tribeca 2017.
7-Luis (Archié López) Un sorprendente cambio de género es el que se atreve a enfrentar el temporal abandono de su referente preferido, la comedia, para adentrarse en el drama social que aborda la crisis de la relación padres-hijos. La mejor actuación de Alfonso Rodriguez para el cine local y buena la adaptación al género de figuras del humor.
8-Todas las Mujeres son iguales, (David Maler), comedia que rompe la tradición previsible del “remake” (Todos los hombres son iguales) que contribuye con eficacia y gracia, al nuevo perfil de la comedia dominicana, que este año logró abrir varios nichos en procura de la realización integral de un cine pensado como fascinación de lo audiovisual
8 Mañana no te Olvides, ( José Enrique Pintor (Pinky) una cinta reflexiva y emotiva sobre las condiciones humanas especiales en la niñez y la tercera edad, realizada dando protagonismo a dos seres que jamás pensaron serlo: Freddy Ginebra y Guillermo Finke, que entregan una carga emotiva y de ternura que necesita la industria para hacerse completa. Estéticamente de resalto de la geogrfía física y humana que retrata.
9– Hay un país en el Mundo (José Enrique Pintor) El mejor de los documentales para representar el país en sus aspectos culturales más diversos. Con una realización muy completa, el proyecto que auspició el Banco BHD, es una pieza para atesorarla cada hogar dominicano y una carta audiovisual válida y colorida ante el resto del mundo.
10- Jeffrey (documental de Janillys Pérez) otra expresión del avance de los documentales de cariz social, alimentado sobre una sencilla historia de un niño con aspiraciones de lograr ser una estrella de la música urbana.
Lo peor del año: Dos compadre y una yola.
El experimento más digno de estudio del año: El Peor comediante del año
El proyecto de ópera prima estudiantil: Azul Magia
La comedia inconclusa del año: Ovni