Banreservas obtiene nueva certificación ‘antisoborno’

El Banco de Reservas informó que ha recibido un segundo reconocimiento de la certificadora internacional Tüv Nord, que avala el estricto cumplimiento de la normativa ISO-37001 en su Sistema de Gestión Antisoborno.

La certificación abarcó los procesos de Negocios Personales de Banreservas, evidenciando su adhesión a la normativa y su enfoque en la mejora continua del Sistema de Gestión Antisoborno.

«Este reconocimiento se logró gracias al liderazgo de las autoridades del banco y al trabajo conjunto de las áreas responsables de cumplimiento ético y anticorrupción», se lee en una nota de prensa institucional.

El proceso contó con el apoyo del Consejo de Directores y refuerza los esfuerzos de República Dominicana en la lucha contra la corrupción.

La primera vez que el Banreservas recibió la certificación fue en mayo pasado, cuando el administrador general de la entidad financiera, Samuel Pereyra, explicó entonces que se trataba de una certificación que hacía «tangible el compromiso de nuestra entidad con los valores éticos y nos posiciona como una de las primeras instituciones financieras certificada de la región”.

Qué es el ISO-37001

La norma ISO-37001, desarrollada y ratificada el 15 de octubre de 2016 por la Organización Internacional de Normalización (ISO), es un estándar internacional que especifica los requerimientos esenciales y ofrece una guía para la instauración, implementación, mantenimiento, revisión, y mejora continua de un sistema de gestión antisoborno.

El modelo es aplicable a cualquier organización, independientemente de su tamaño, sector de actividad, estructura, ubicación geográfica o jurídica. Según la misma norma, tanto las empresas del sector privado como las del sector público pueden beneficiarse de su implementación.

La norma define el soborno como la propuesta, promesa, entrega, aceptación o solicitud de un beneficio ilícito de cualquier magnitud.

La ISO-37001 proporciona herramientas útiles para que las organizaciones puedan detectar y gestionar el riesgo del soborno, incrementando así la cultura de resistencia a este delito

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