La Biblioteca Central Pedro Mir de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, es una de las más completas del país por sus fondos editoriales que incluyen un centro de documentación especializado en salud, y atiende diariamente, entre 10 y 12 mil usuarios, sobre todo por la vía virtual, proceso en el que contaba con amplia experiencia y trayectoria, revela a los medios su director general.
El licenciado Héctor Luis Martínez, indica que esa unidad documental en salud tiene la más amplia red de publicaciones temáticas de los organismos Naciones Unidas, catalogadas en la UASD como Fondo Completo en Salud.
A esta oferta para lectura e investigación, la Biblioteca Pedro Mir agrega una de las más amplias colecciones de obras de autores dominicanos en el país y la sección denominada Fondo Antiguo con material bibliográfico único y una amplia bibliografía de libros de temas generales.
Martínez resalta que esa biblioteca se ha organizado con un criterio moderno, que incluye el aspecto digital, para proveer los recursos requeridos por los estudiantes en su proceso de formación y facilitar la consulta a los investigadores, nacionales y extranjeros que, en gran número, procuran sus servicios.
Revela que el promedio diario de usuarios en el recinto central universitario es de 10 y 12, cantidad que excluye el servicio de sus bibliotecas subsidiarias en 18 provincias.
Refiere que el COVID 19, se produjo cuando esa biblioteca ya tenía tiempo ofertando servicios digitalmente: “La inserción de nuestros servicios en el mundo digital data de varios decenios. Hoy se hace más visible por la pandemia que nos afecta. En este marco, en el campo de la virtualidad, el logro mayor ha sido la puesta de una plataforma digital al servicio a los uasdianos”.
Explica que se trata de la plataforma Moodle, la misma que ahora usan en el semestre actual. “Gracias al esfuerzo de las autoridades, estimuladas por la rectora Emma Polanco Melo, la UASD cuenta con una plataforma que cumple y supera los estándares que impone el mundo de la comunicación digital, cuyo provecho llega a los múltiples servicios que ofrece la Biblioteca Pedro Mir”.
Respecto de la prevención del COVID 19, la biblioteca ha generado un código de bioseguridad que busca proteger, y lo logra, a servidores y los usuarios de la biblioteca.
Martínez dice que ha terminado el proceso de migración de data del sistema integrado de gestión de bibliotecas Voyager al Koha, a lo que se agrega la suscripción de la base de datos EBSCO, cuyo aprovechamiento crece de semestre en semestre gracias a los talleres de inmersión.